jueves, 13 de septiembre de 2007

Foro: Derechos para la diversidad sexual

El día de hoy, jueves 13 de septiembre, quienes integramos Diversidad Alternativa asistimos al foro "Derechos para la diversidad sexual", organizado por la Fundación Voz Alternativa, que preside Patricia Mercado y el Grupo Parlamentario de Alternativa Socialdemócrata en la Cámara de Diputados, representado por la Diputada Federal Elsa Conde.

A este foro asistieron Patricia Mercado, Rosa Mayra Rodríguez Lauzurique, quien participa por la Comisión para la Atención de los Trastornos de Identidad de Género- CENESEX-Cuba, el Diputado Federal Delio Hernández Valadés, Presidente de la Comisión Especial sobre No Discriminación, Nuevos Sujetos y Nuevos Derechos, Roshell Terranova, del Frente ciudadano Proderechos de las personas Transgénero y Transexuales, una representante del Diputado Federal David Sánchez Camacho y Adolfo Gama, integrante de Diversidad Alternativa. Moderó la Secretaria de Equidad, Género y Derechos Humanos del Comité Ejecutivo Federado de Alternativa Socialdemócrata, Rosalinda Ávila.

A continuación, presentamos el texto de la ponencia con la que participó Diversidad Alternativa, en voz de nuestro compañero Adolfo Gama:


POR UNA IGUALDAD DE DERECHOS

Cuando algunas personas escuchan el término diversidad sexual, se remiten a los gays y las lesbianas, imaginándolos como hombres con actitudes socialmente reconocidas como femeninas o mujeres con actitudes socialmente reconocidas como masculinas.

Eso mismo sucede cuando algunas personas escuchan el término familias diversas, inmediatamente piensan en la pareja de hombres o mujeres que han decidido compartir un hogar.

Y sí, no están tan alejados de la realidad, sin embargo, se quedan cortos o cortas en su apreciación, ya que les falta por contemplar en esos dos términos a una cantidad enorme de posibilidades; es decir, también existen hombres y mujeres homosexuales con actitudes, socialmente reconocidas como masculinas y femeninas, respectivamente, también hay hombres y mujeres bisexuales, hombres y mujeres transgénero, travestis, transexuales y por supuesto heterosexuales, y todos ellos y ellas pueden formar familias con o sin hijos o hijas, e incluso sin que exista una relación sexo afectiva entre ellos o ellas.

Hasta aquí parecería que aclarado el punto se resuelve la problemática, pero no es así, si decidimos entrar al terreno de los derechos, nos topamos con una enorme barrera. En México todavía no terminan de reconocerse, respetarse y ejercerse los derechos de las personas pertenecientes a la población lésbica, gay, bisexual, trangénero, travesti y transexual.

Existen grupos y personas en lo individual que discriminan por motivos de orientación sexual, y eso evidentemente vulnera el desarrollo personal y profesional de quienes resultan afectados y afectadas.

Por supuesto y desafortunadamente esto no sucede sólo en nuestro país, por citar algunos ejemplos de actitudes homofóbicas diré que el presidente de Zimbabwe en alguna ocasión dijo: los gays son peores que perros y cerdos, asegurando además que la homosexualidad no es un fenómeno africano, sino una degeneración occidental. En Polonia, durante su comparecencia en pleno y ante la posibilidad de la realización de una marcha por el orgullo lésbico gay, un diputado sugirió que: “si los desviados comienzan a manifestarse, habrá que aporrearlos”.

En nuestro continente, el grupo rastafari jamaiquino, llamado Elephant Man, incluye en una de sus canciones la siguiente frase: Cuando oyes que han violado a una lesbiana, no es culpa nuestra. Está mal. Eso son dos sodomitas que deberían estar muertas. Cabe señalar que Jamaica es un país que tiene tipificada como delito la homosexualidad, al igual que otros muchos países del mundo, incluyendo ocho con tradición islámica, en donde la condena es la pena de muerte.

Durante los últimos 5 años, mil personas fueron asesinadas en México por homofobia, en Latinoamérica cada dos días es asesinada una persona homosexual.

¿Cómo abordar el tema de la diversidad sexual desde el terreno político? Si la diferencia en el ámbito sexual implica una discriminación flagrante, entonces es motivo suficiente para que esa diferencia sea un asunto público y político. En su Primer Tomo de Historia de la Sexualidad, Foucalt explica que una de las formas más violentas y severas de discriminar a una persona es la censura.

Y son justo la censura, la negación y la invisibilidad a la que han sometido varios sectores de la sociedad mexicana y muchas de sus autoridades a los grupos sexo diversos, lo que ha impedido a lo largo de la historia la participación activa en la toma de decisiones y en la creación de políticas públicas, de quienes ejercemos una sexualidad diferente a la heterosexual.

En Diversidad Alternativa levantamos la voz, dejamos claro que la problemática que gira alrededor de la diversidad sexual incluye la falta de acceso a muchos servicios, pugnamos por la protección de aquellos jóvenes que son discriminados por sus familias y que no tienen posibilidades de continuar con sus estudios profesionales, queremos impulsar la creación de espacios de intercambio cultural y artístico con temáticas de diversidad sexual, exigimos la implementación efectiva de campañas de educación sexual y reproductiva, así como de prevención de infecciones de transmisión sexual, promoveremos ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos y las correspondientes Comisiones en cada entidad, la creación de concursos de Ensayo sobre temáticas de diversidad sexual, actualmente la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal cuenta con uno referido a la discriminación en sus diferentes modalidades. Asimismo, exigimos el esclarecimiento de los crímenes de odio por homofobia cometidos en nuestro país, y la instrumentación de campañas de sensibilización en materia de diversidad sexual, dirigidas a los cuerpos policiacos y a las autoridades encargadas de la procuración e impartición de justicia.

En Diversidad Alternativa, un Colectivo integrado por mujeres y hombres, pugnamos por la equidad de género, nuestra misión es incidir social y políticamente para que las mujeres accedan a cargos públicos de dirigencia y se respeten y reconozcan sus capacidades en todos los ámbitos. Las niñas y los niños también son importantes para nosotras y nosotros, por ello solicitaremos a las autoridades correspondientes, la creación de materiales educativos que fomenten el reconocimiento y el respeto de la diversidad sexual desde los niveles básicos de educación escolar. En este sentido, es prudente tomar el ejemplo de países como Argentina, España e Inglaterra que ya cuentan con acervos de cuentos infantiles en materia de diversidad sexual. Sólo así podremos entender que la riqueza de la diversidad radica en que no todas las personas expresamos nuestros afectos de la misma forma, que cada quien pone el énfasis donde más le gusta o se siente cómodo o cómoda.

Nuestra lucha, además del reconocimiento por una igualdad de derechos, se centra en la erradicación de la discriminación por orientación sexual, con base en ello, hemos guiado nuestras acciones a partir de febrero de este año. En ese sentido, realizamos un evento para reconocer la diversidad de las familias y una Marcha Silenciosa en el marco del Día Internacional de lucha contra la homofobia, entre muchos otros.

El camino a transitar para garantizar una igualdad de derechos es largo. Hemos tenido avances en lo legislativo, aunque vale reconocer que la igualdad legal no garantiza la igualdad social.

Sin embargo, tal como lo refiere el Grupo Parlamentario de Alternativa Socialdemócrata en la Exposición de Motivos, relativa a la Iniciativa de decreto que reforma diversos artículos de las Leyes General de Salud, del Seguro Social, del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado y Federal del Trabajo, para la inclusión de personas que inscriban una Sociedad de Convivencia como beneficiarios en los supuestos de dichas leyes, “Hemos sido testigos en las últimas décadas del surgimiento y desarrollo de nuevas formas de convivencia, distintas a la familia nuclear tradicional. En todo el mundo, los modelos de convivencia están pasando por profundas transformaciones debido, en gran medida, a la redefinición de las relaciones entre los géneros, y a la conquista de derechos civiles y sociales.

“Ante estos hechos, existe ahora un marco jurídico que contempla y protege las diversas formas de convivencia, erradica y previene la discriminación que pretende promover una cultura de respeto a la diversidad social. Una condición indispensable de la modernización y democratización de los Estados, así como del ejercicio de una ciudadanía plena, ha sido la implantación y el arraigo de valores incluyentes, igualitarios y respetuosos de la diversidad como lo es la Ley de Sociedad de Convivencia del Distrito Federal la cual fue aprobada el día 9 de noviembre de 2006 y publicada el día 16 del mismo mes.”

Asimismo, la Exposición de Motivos referida señala que “la Sociedad de Convivencia constituye una figura jurídica nueva que no interfiere en absoluto con la institución del matrimonio ni la vulnera. No impide la práctica del concubinato en su estructura actual y no modifica las normas vigentes relativas a la adopción. Implica reconocer consecuencias jurídicas y derechos como lo es la inclusión y el reconocimiento en las leyes de seguridad social en su carácter de titular o beneficiario (a) de los diferentes derechos y prestaciones que obtienen a través de las diversas formas de convivencia humana, que como formas de integración social, mejoran la calidad de vida de sus habitantes.”

Con la entrada en vigor de esta iniciativa se garantizará el ejercicio efectivo de uno de los derechos de Segunda Generación, tal como lo clasifica la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que a la letra dice: Toda persona tiene derecho a la seguridad social y a obtener la satisfacción de los derechos económicos, sociales y culturales.

Por ejemplo, al reformarse diversos artículos de la Ley General de Salud, se reconocerían como núcleos familiares los integrados por convivientes o por aquellas personas que sostengan relaciones jurídicas de convivencia equiparables por virtud de cualquier legislación local, al matrimonio o concubinato. Asimismo, se solicitaría la autorización correspondiente para la donación de órganos, el transplante entre vivos, la práctica de necropsias y el reclamo de cadáveres en instituciones educativas a los convivientes o a aquellas personas que sostengan relaciones jurídicas de convivencia equiparables por virtud de cualquier legislación local, al matrimonio o concubinato.

En cuanto a la Ley del Seguro Social, la reforma busca reconocer como beneficiarios o beneficiarias de los servicios de salud, así como del otorgamiento de las pensiones por invalidez o viudez a los convivientes o a las personas con las que sostengan relaciones jurídicas de convivencia equiparables por virtud de cualquier legislación local, al matrimonio o concubinato

Las reformas que contempla la iniciativa, respecto de la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado, reconoce como derechohabientes, así como beneficiarios de las pensiones por jubilación, de retiro por edad y tiempo de servicios o por cesantía en edad avanzada, a los convivientes o a aquellas personas con las que los asegurados sostengan relaciones jurídicas de convivencia equiparables por virtud de cualquier legislación local, al matrimonio o concubinato.

Finalmente, la reforma a la Ley Federal del Trabajo garantiza que los convivientes o aquellas personas que sostengan relaciones jurídicas de convivencia equiparables por virtud de cualquier legislación local, al matrimonio o concubinato, reciban la indemnización correspondiente en los casos de muerte del trabajador o trabajadora.

La aprobación de esta iniciativa de reforma dará certidumbre y derechos legítimos a las personas que han decidido establecer un hogar común, con voluntad de permanencia y ayuda mutua, a través del registro de una Sociedad de Convivencia o alguna otra figura equiparable al matrimonio o al concubinato.

Esto nos acercará un poco más al ideal que perseguimos en Diversidad Alternativa, esto es, una igualdad de derechos.

ADOLFO GAMA MARTÍNEZ